

La Navidad es una ocasión más para anunciales la presencia amorosa de Dios y con una historia de títeres, ellos logran captar que Jesús es un amigo cercano.

La solidaridad de familias Calasancias hizo posible que 460 niños y niñas recibieran un regalo y se dibujara una sonrisa en sus rostros.

Muchas gracias a todas las personas que hicieron visible el amor a la gente del Alto de la virgen aportando a este proyecto educativo y pastoral.
LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS NOS RECUERDAN QUE LA ALEGRÍA ES POSIBLE EN MEDIO DE LA ADVERSIDAD, PORQUE DIOS ESTÁ A NUESRO LADO.
FELIZ NAVIDAD

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